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Compartir con los chicos es una bendición, dar de lo que ni es de nosotros, pero si que somos los administradores, me refiero al tiempo. Sí, porque a veces pensamos que para dar algo a los demás es necesario tener bienes materiales o riquezas. Sin embargo, no nos damos cuenta que lo mejor es dar de lo que tenemos y eso es mucho, por ejemplo, una sonrisa, unas palabras, dar de nuestro tiempo y darlo de corazón a quienes lo necesitan.
En una comida
Compartir un tiempo para ellos y compartir los alimentos juntos es mucho mejor. Porque aquí es donde se muestra la hermandad, la fraternidad y sobre todo, la caridad. Es decir cuando se da el tiempo, cuando se comparte las experiencias y cuando se comparte con mucha alegría.
En esta imagen se ve como el día es agradable al saber que si se puede ver a los demás como nuestros verdaderos hermanos y que sí podemos ayudarnos unos a otros y que sí podemos hacer algo por los otros, porque todos necesitamos de los demás y por eso hay que compartir a fin de hermanarnos unos con otros.
El Padre Marco Antonio, Sacerdote Escolapio
El comparte su tiempo con los adolescentes un día domingo. Aquí es donde se celebra la vida con más gozo, porque aquí encontramos a ese Dios cristiano en cada uno de estos muchachos, aquí es donde escuchamos la voz que nos habla a hacer algo por él y hacerlo a través de cada uno de estos niños, adolescentes y jóvenes.
Tener una misión de pastor, no es estar estático en un solo lugar para ver que la gente llegue a ver a Dios en un sitio, sino es saber acompañar y sobre todo a quien más lo necesita, ser sacerdote no es ser encargado de hablar de Dios, sino de mostrar a ese Dios vivo con y en la vida.
Compartiendo los alimentos
Llega la hora de compartir los alimentos, los chicos lo hacen, pero antes oran por los que no tienen mucho o nada en el sitio donde se encuentran. Ellos que conocen situaciones difíciles de la vida, saben agradecer a Dios por lo que hoy tienen y que pueden compartir en un buen lugar.
Ellos están felices, pero saben que hay otros o muchos que no tienen esa oportunidad de disfrutar el acompañamiento de otras personas que puedan dar de su tiempo y de sus recursos para lograr lo que ellos viven ahora. Por eso ellos siempre estarán contentos al saber que alguien puede y quiere unirse a esta familia para promover el bien común.
En una casa de una familia que perteneció a Hogares Calasanz
Compartir aquí es una alegría y una prueba de que vale la pena ayudar, porque hay quienes si se dejan ayudar y así logran salir adelante. Gracias a esta familia los chicos han podido disfrutar de un bonito día.
Así como nosotros buscamos la sombra para estar bien en un día soleado, así también mucha gente necesitada y especialmente lo niños, adolescentes y jóvenes buscan que alguien les cubra con el calor humano para sobresalir en la vida que les a tocado. Por eso si tu ya eres de esta familia, te agradecemos por tu gran ayuda, pero si no, te exhortamos a que lo hagas ya que para nosotros y sobre todo para los chicos eres muy importante.
HOGARES CALASANZ